Deportivo Patagones espera el partido de vuelta con mucha tranquilidad. Después del empate del domingo frente a Boca, en Río Gallegos (0-0), por los octavos del Torneo del Interior, los dirigidos por Jaime Devincenzi llegaron a casa luego de 21 horas de viaje. Apenas se bajaron del micro el técnico dispuso "trabajos regenerativos", que se hicieron en medio de un clima de distensión.
Uno de los más alegres fue Adrián Vejar, de gran partido en tierras santacruceñas, ya que se encargó de anular a los delanteros Darío D´Augero y Fabián Speche.
El defensor "maragato", uno de los refuerzos del "tricolor", explicó que en Río Gallegos fue un partido "duro y muy complicado. La cancha sintética era rarísima y no estamos acostumbrados a este tipo de suelo. En varios momentos la pelota tenía un pique extraño y el juego se hizo muy rápido. Por suerte nos salió bien".
Vejar asegura que las estadísticas de Boca (sólo perdió un partido de los 12 disputados y apenas recibió dos goles en contra) no le quitan el sueño.
"Villa Iris era banca, al igual que Maronese y Allen, pero los vencimos. Nosotros siempre vamos de punto, pero a esta altura poco importa eso. Confiamos en nuestro grupo. Somos 25 jugadores de nivel parejo, que dejan todo en la cancha", remarcó el marcador central.
En el cierre, un mensaje para el hincha: "El domingo necesitamos que vayan todos, eso nos hará fuertes".