Jugar en la cancha del Santo en el Barrio Mi Bandera de Viedma es un castigo, un castigo para todos, para los que juegan, los que estan en el banco, para los que miran, sobre todo cuando el frio patagonico se hace presente y aparece el viento Sur, precisamente ahi, donde no hay reparo y castiga de lleno contra todo el mundo.
Cancha fea, llena de piedras y con viento muy fuerte ES UNA MIERDA. A nadie se le ocurriria jugar por gusto en ese lugar, y a los arbitros (en el caso de ayer al Sr. Arden) esto les pesa y tratan de darle alguna alegria a los locales y se ponen sistematicamente la camiseta amarilla. Un horror deportivo, aca el futbol se transforma en un deporte extremo.
Cancha fea, llena de piedras y con viento muy fuerte ES UNA MIERDA. A nadie se le ocurriria jugar por gusto en ese lugar, y a los arbitros (en el caso de ayer al Sr. Arden) esto les pesa y tratan de darle alguna alegria a los locales y se ponen sistematicamente la camiseta amarilla. Un horror deportivo, aca el futbol se transforma en un deporte extremo.

Igual clasificamos primeros en la zona B.





El domingo pasado perdimos en un partido lamentable (Verdugo expulso a Vejar, Iogna y Nico Sosa) por el arbitraje, donde el Depo con ocho hombres no merecio la derrota (0 a 1 con SLBL).