viernes, marzo 31, 2006

Ni olvido, ni perdón (abril el 2002)

Patagones. Deportivo Patagones quedó fuera del Apertura 2002 de la Liga Rionegrina de Fútbol por no garantizar su continuidad deportiva y la mayoria de sus jugadores pasaron a vestir la camiseta e otros clubes; así finalizó anoche la novela que protagonizaron durante las últimas dos semanas autoridades del club, futbolistas, técnico, juez, síndico, hinchas y miembros de la LRF.
Manteniéndose en el anonimato jugadores, dirigentes y simpatizantes, reconocían en los últimos días que las negociaciones con el juez estaban demoradas, pero tenían una pequeña luz de esperanza de que deportivo conseguiría por segundo año consecutivo superar las dificultades que trae la quiebra del club.
Mientras algunos Dt’s se relamían por los jugadores que incorporarían, otros se preocupaban por saber si jugarán “ya” este domingo. Por suerte para ellos las transferencias deben ser aprobadas por el síndico, trámite que tardaría al menos dos semanas. Este torneo, los aficionados tendrán que acostumbrarse a la ausencia del tricolor, aunque sus referentes estarán presentes en otros planteles.

Esto es (textual) lo que apareció en el Diario "Al Día" de Carlitos Blanco en abril del 2002, es su versión sobre la ausencia del Tricolor en los torneos de la Liga de Beacon.
Todos sabemos cual fue la realidad (sobre todo los que estuvimos intimamente involucrados en estos acontecimientos), no dice la nota que "la perdida de la continuidad deportiva" del Deportivo Patagones fue votada en la Liga por los representantes de los clubes que la componian en ese momento. Y que son precisamente los que aparecen en la misma nota (un poco más abajo) en la tabla de posiciones donde el Depo está ausente.
No se si todos levantaron la mano, pero ganó la mayoría.
Y también se siente (por parte del autor del articulo) cierto regocijo, cierta alegria mal tapada por palabras estupidas, de que otros equipos se disputen la presencia en sus filas de los jugadores del Club (y por algo aquí lo pongo con mayusculas), que a la larga y aprovechando la situación con algunas trampas burocraticas y económicas, se quedaron con el pase definitivo de jugadores que se habian formado en nuestras inferiores.
Bueno, por suerte en el Depo estaban los dirigentes, los hinchas y los jugadores que hicieron posible salir de esta desgracia.
Ahora solo es un mal recuerdo, pero ojo no nos olvidamos de nada.